Belén, Jesús y su encantadora hija Salma salen a dar un paseo, a jugar con aviones de papel … a pasar una tarde juntos en un día cualquiera de primavera.
Pero esta vez no van solos, Bea (la tía de Salma), quiso que yo les acompañara para que pudieran tener en papel un recuerdo de una día de sus vidas,de un día de abril del año dos mil doce.